Bart Simpson

Bart J. Simpson es el hijo de 10 años de la familia Simpson. Como muchos personajes de Los Simpsons, le debe su nombre a personas importantes en la vida de Matt Groening: Bart es un anagrama de "brat" (mocoso en ingles) y también está inspirado en el hermano menor de Matt.
La relación con Homero, su padre, es de amor-odio: los dos tienen un comportamiento despreocupado que los hace compartir mucho de sus gustos, como quedarse frente al televisor sin hacer nada; sin embargo, en muchos capítulos Homero ha recurrido a castigos muy violentos para reprenderlo, principalmente estrangularlo mientras le grita “¡pequeño demonio!”. Su madre Marge, por el contrario, lo sobreprotege y lo consiente en todos sus caprichos; se refiere a el como su “Pequeñín especial”. Su hermana menor, Lisa, es víctima de sus frecuentes abusos, pero en el fondo la quiere mucho y está dispuesto a defenderla cuando sea necesario. Al parecer, no se preocupa por su pequeña hermana Maggie, llegando incluso a permitir que se escapara con el auto en una ocasión que estaba encargado de cuidarla, aunque en el fondo también siente mucho cariño por ella.
Bart es el más incomprendido de los Simpson. Es zurdo, pero no es por eso incomprendido. Él es frustrado constantemente por las personas cerradas de Springfield que lo juzgan solamente por sus pensamientos y acciones. En fondo, Bart es apenas un niño bueno con unas pocas ideas malas, un par de ideas realmente malas y algunas otras que todavía están siendo revisadas por el Fiscal de Distrito de Springfield. Básicamente, Bart no es diferente de cualquier alumno del cuarto grado ordinario: goza de andar en su skate, mascar chicle, los Squishees del Kwik-E-Mart de Apu, y huir de Bob Patiño, un asesino ex-estrella de la TV.
Catalogado como "alumno de bajo rendimiento y un busca pleitos" por las autoridades, sus notas oscilan entre lo malo y lo pésimo, en constante vaivén. Si embargo, Bart puede ser inteligente e ingenioso... siempre que no tenga que ver con algo relacionado a la educación. El aprendió de memoria partes del Talmud para ayudar a su ídolo, Krusty el Payaso, a reunirse con su padre, el rabino Krustofsky. Quizás más que nada, las primeras palabras de Bart en su niñez marcan su personalidad: "¡Ay, Caramba!” - una gran verdad tanto hoy como lo fue la primera vez que la pronunció.
"¡Yo no fui!" y "¡De fábula, viejo!" son sus otras de sus más famosas frases.
Pese a su corta edad, Bart (también conocido como alter-ego “El Barto”) ha logrado realizar varios sueños: ha sido la estrella en la serie de televisión de su ídolo Krusty, el Payaso; ha localizado y nombrado a un cometa letal que casi destruye a su ciudad; ha inyectado romance a la vida de su profesora, Edna Krabappel; destruyó una vinería ilegal francesa durante su breve semestre en el exterior; ha ofendido a la iglesia comunitaria de Springfield con himnos falsos; ha hecho innumerables llamadas burlonas a la taberna de Moe varias veces al día durante los últimos años; ha fastidiado al Director de la Escuela Primaria Skinner cuantas veces pudo; y por poco consigue el papel del Chico Fisión en la película del Hombre Radioactivo.
No habría podido hacer nada de esto sin su habilidad para la maldad, y a veces tampoco sin la ayuda y el apoyo de su perro, el Ayudante de Santa, o su mejor amigo Milhouse Van Houten.
Se le conocieron algunas relaciones amorosas, como Jessica Lovejoy y Laura Powers, pero claro, su mayor interés no está en las chicas, sino en no perderse un sólo capítulo de Tomy y Daly, su show favorito de dibujos animados.